Revestir paredes con madera
En el mercado se pueden conseguir paneles de madera de diferentes tamaños, tonalidades y acabados que son perfectos para revestir paredes.
Por su variedad estamos en frente de una opción muy versátil en cuanto a estética y decoración ya que es capaz de adaptarse a todos los estilos.
La madera, como siempre, tiene una gran aceptación dentro del diseño pero además de esto también tenemos que destacar otras ventajas como el tratarse de una perfecta solución para disimular paredes en mal estado.
Al revestir paredes con madera no solo mejoraremos su estética sino que también las aislaremos acústicamente logrando crear ambientes más pacíficos y relajantes.
Revestir paredes con papel y telas
Aunque son dos opciones diferentes, sus características son muy similares variando solo en el precio ya que las telas para revestir son mucho más costosas que el papel y además, también requieren de un mayor trabajo de mantenimiento.
Estos dos nos ofrecen un sin fin de posibilidades en decoración ya que se presentan en innumerables diseños, texturas y colores. Es más, hoy en día muchas empresas se dedican a realizar papeles y tejidos para revestir paredes con diseños personalizados.
Para su colocación lo único que requieren es la preparación de la pared para que quede una superficie lisa y pareja.
Revestir paredes con azulejos y cerámicas
Generalmente estos se aplican en las paredes de ambientes húmedos por la gran impermeabilidad y la resistencia de estos materiales. Es muy común verlos en baños, cocinas y en paredes exteriores.
También se presentan en una amplia gama de diseños permitiéndonos crear ambientes que combinan a la perfección la elegancia y la naturalidad.Su precio es más elevado y requiere de una colocación cuidadosa para evitar que luego se desprendan, por eso lo más recomendable es contratar a un profesional.
Revestir paredes con metal
Se trata de una propuesta mucho más moderna y vanguardista. Son planchas de metal, generalmente de acero inoxidable, que se pueden colocar sobre las paredes sin mucho esfuerzo.
Entre sus principales cualidades debemos destacar la resistencia, durabilidad y la fácil limpieza por lo que es muy recomendable utilizarlas en cocina; aunque también por su estética tan atractiva es una buena opción para salas de estar.
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